Durante siglos, el sector de la confección ha sido uno de los más importantes de la economía eslovena. En 2019, Eslovenia exportó prendas de vestir por valor de 377 millones de dólares. Algunas de las prendas de vestir producidas en Eslovenia incluyen prendas para bebés, ropa para niños, ropa para hombres, ropa para mujeres, uniformes, ropa de trabajo, ropa informal y prendas tradicionales.
En Eslovenia hay alrededor de 400 empresas de confección. Algunas de las empresas operan como instalaciones de producción subcontratadas para marcas de moda locales y extranjeras. Ljubljana: la capital de Eslovenia tiene alrededor de 40 empresas, Kranj tiene 18 y Maribor tiene 16 fabricantes de ropa. Otras ciudades como Celje, Domžale, Medvode, Škofja Loka e Izola también tienen una buena proporción de empresas de confección. Estos fabricantes se especializan en la confección de todo tipo de prendas de vestir utilizando técnicas de costura modernas.
Eslovenia tiene una rica historia en la fabricación de prendas de vestir desde la antigüedad y el gobierno esloveno ha invertido en capacitar a su fuerza laboral para seguir siendo competitivo en el mercado internacional de prendas de vestir. Como resultado, Eslovenia tiene una fuerza laboral altamente calificada en la industria de confección que los fabricantes pueden aprovechar.
Eslovenia está situada entre Europa Central y los Balcanes Occidentales, y su posición estratégica permite a los fabricantes acceder tanto a los mercados emergentes como a aquellos con gran demanda. También ayuda con la logística, el despacho y el envío rápido.
Eslovenia cuenta con una infraestructura altamente desarrollada para el transporte interior de mercancías. El país cuenta con carreteras modernas, tres aeropuertos internacionales, Internet rápido, un puerto moderno y una red ferroviaria. Con su confiable tecnología de la información y las comunicaciones, las empresas pueden beneficiarse de conexiones perfectas y una comunicación sin problemas.